lunes, 4 de julio de 2022

LOS CELOS

 


COLUMNA: ESTAMOS EN CONEXIÓN

LOS CELOS

Por: Jorge García D.

 

“Los Celos en el romance son como sal en los alimentos. Una pizca nunca viene mal, un toque, talvez mejore el sabor de los alimentos, sin embargo, abusar de ella puede estropear el placer del paladar y, bajo ciertas circunstancias, puede poner en peligro la vida” -Maya Ángelo-

 

Los celos son un sentimiento de malestar causados por la sospecha o temor que la persona amada, le sea infiel de manera sexual, emocional o en pensamiento, es esa sensación de malestar al sentir que el amor, la pasión, el afecto, cariño y atenciones se trasladan a otra persona; creándose en nosotros como consecuencia, esa necesidad de reafirmar que la persona que celamos es nuestra y nos pertenece, surgiendo un exagerado afán de posesión de forma exclusiva. Los celos, por lo tanto, son una respuesta emocional que pretende proteger ese elemento que se considera bajo amenaza o perdida. Los celos no son un sentimiento exclusivo de las relaciones de pareja, existen celos con los padres, entre hermanos, miembros de la familia, amigos, compañeros, colegas, en lo profesional y social.

 

Los celos, como el resto de las emociones (tristeza, alegría, frustración, enojo, miedo, ira) forman parte del ser humano. Sentir celos de forma moderada no es sinónimo de estar trastornado, pero se convierte en algo patológico cuando la sensación de malestar es tan absorbente que interfiere negativamente en nuestras relaciones afectivas, amorosas, y en el bienestar personal.

 

PERO, ¿QUÉ SON LOS CELOS? Los celos son una señal que me informa subconscientemente del peligro latente de perder el cariño del ser amado, por la presencia de un tercero, junto con la sensación de sentirse excluido y abandonado, y perder esa exclusividad que no poseemos.

 

¿CUÁLES SON LAS CONDUCTAS DE LAS PERSONAS CELOSAS? Los celos comienzan con una sutil desconfianza de que la pareja o la persona amada sea infiel. Esta duda produce tal angustia que lleva a un estado de vigilancia o desconfianza constante.

 

Al principio la conducta más frecuente es hacer una serie de preguntas que parecen inocentes, para averiguar qué hizo la pareja cuando él o ella no estaba, no se vieron, o están distanciados por diversas causas, surgiendo diversos cuestionamientos, cómo: ¿Qué hiciste? ¿Con quién estuviste, ¿A dónde fuiste?, ¿Con quién hablaste?... Y es en esta primera etapa, que la pareja se esfuerza en explicar con detalle todas sus acciones para convencer y despejar las dudas totalmente infundadas, siendo un error, lo cual sería mejor tomarse el tiempo para hablarlo y discutir de dónde o por qué surge esta desconfianza, pues raramente se llega a convencer y las dudas persisten con del paso del tiempo.

 

Donde el celoso comienza una nueva conducta de atención y vigilancia: registro de bolsillos, constantes llamadas telefónicas, mensajes, visualización, stalkeo o hasta hackeo de cuentas personales, redes sociales, correos, horarios, seguimientos, revisión de la ropa, aromas, etc., todo en busca de signos de infidelidad; conductas comprobatorias que tienen como objetivo reducir la angustia provocada por los celos, logrando un alivio transitorio, volviendo repetirse el malestar, iniciando el mismo proceso y quizá más severo, con el paso del tiempo o situación.

 

Creando un clima emocional de angustia, donde el celoso dedica parte de su tiempo a comprobar la veracidad de sus sospechas, que en la mayoría son infundadas, llegando a interferir en el desarrollo de su vida personal, cotidiana, de pareja, familiar, laboral, de armonía, amor, y confianza; provocando desconfianza, tristeza, depresión, angustia, ira, enojo, situaciones insostenibles que terminan por desintegrar la relación de pareja, con pensamientos distorsionados e irracionales; miedos que llevan a intentar controlar la pareja, pretendiendo alcanzar una seguridad que reafirme la relación.

 

Sin embargo, los celos en algunas ocasiones o en medida, pueden ayudar a gestionar la relación de pareja, dar una actitud de jugueteo, que enfocada de una manera que pueda ser aceptable no llega a ser nociva. De hecho, tener un poco de celos puede ser indicativo de que alguien se preocupa por su pareja; que verdaderamente le interesa cómo este o si le haya pasado algo, si pudiera ayudar o apoyar en cualquier tipo de circunstancia, como un indicativo de “Estoy aquí para ti, a la hora que sea, sabes que cuentas conmigo”, en este sentido, pueden ser positivos, ya que nos estimulan a cuidar nuestra relación, procurar a nuestra pareja, y ser compañero/a de vida. Tener celos no es necesariamente malo en sí mismo, pero sino se controla puede ser perjudicial.

 

QUÉ HACER, SI SIENTES CELOS O SE RECONOCEN CELOS EN LA PAREJA. Primeramente, debemos asumir que sentir celos es lo más natural entre los seres humanos, porque son parte de nuestras emociones, decir que -sientes celos- y abrir este tema con mi pareja, sin duda no es tarea fácil y mucho menos un momento grato, porque significa abrirnos y mostrar nuestra fragilidad o vulnerabilidad, pero siempre es muy necesario y parte de la confianza que se vera fortalecida con la pareja, y decir las causas de esa angustia, d ese estado o de ese tipo de situación, la cual ayudara a ambos a entablar una relación de comprensión, entendimiento y confianza. Si ambos estamos en condiciones de hablarlo y entablar este dialogo, hacerlo, nos permitirá conducir la mirada a un balance global de la relación; es decir podremos pensar en qué es lo que está faltando entre nosotros, qué hemos descuidado, o qué se ha perdido... desembocando en un restablecer quienes somos dentro de nuestra relación, reconstruir y fortalecer o decidir qué hacer, y pedir ayuda profesional, siempre en búsqueda de estar mejor, felices, plenos y en armonía y sobre todo en pareja, estable, en amor y confianza.

 

¿CUÁLES SON LAS CAUSAS QUE ORIGINAN LOS CELOS? Todas las personas, en un momento dado, hemos sentido celos que pueden ser más o menos intensos, en función de diversos factores, pero principalmente de lo que los motiva. Algunos pueden ser:

·         Sentimiento de posesión hacia la pareja.

·         Miedo a perder a la persona amada.

·         Temor a estar solo o a no encontrar otra pareja.

·         Miedo real a no poder tener otra pareja.

·         Baja autoestima.

·         Problemas de apego en la infancia, ausencia de atención y escases de cariño.

·         Experiencias previas de engaños e infidelidades, mentiras y más.

·         Patrones afectivos mal aprendidos.

·         Desconfiar y compararse con las personas que rodean a la pareja o tienen contacto.

·         Considerar las relaciones o acciones anteriores de la pareja como amenaza constante.

 

RASGOS DE PERSONALIDAD DE LA PERSONA CELOSA Las personas celosas sufren un gran malestar emocional fruto de la desconfianza y de un exagerado afán de posesión, teniendo estos ciertos rasgos de personalidad característicos:

Son inseguros. Son muy desconfiados. Tienen baja autoestima. Suelen ser introvertidos, reprimir sentimientos, emociones o externar su malestar. Experiencias malas recurrentes.

 

EXISTEN TRES TIPOS MUY DIFERENCIADOS DE CELOS:

·         Celos reactivos: son los que se producen como respuesta a un estímulo externo de amigos, ex parejas, familia, comentarios o hasta por la misma pareja, con comentarios o acciones.

·         Celos ansiosos: son celos basados en un temor infundado. Son los más comunes, y generan una sensación de suspicacia y falta de confianza en la pareja.

·         Celos posesivos: basados en la creencia que la pareja nos pertenece. Son especialmente perjudiciales, ya que se limita la libertad de la pareja, derivando en actitudes hostiles.

 

¿CÓMO SE PUEDEN TRATAR LOS PROBLEMAS DE CELOS EN LA PAREJA? Cuando los celos empiezan a deteriorar la relación de pareja, es necesario acudir con un profesional que nos ayude, determinando cuál es su causa; solo así podremos empezar a buscar una solución efectiva que nos permita ponerles fin o, al menos, controlarlos. Trabajar la autoestima, tener una buena comunicación, fortalecer la confianza y edificar una nueva relación basada en el amor, confianza, plenitud, convivencia, comunicación, sexo, cariño, aceptación del otro, toma de decisiones compartidas, y atención.

“En los hombres y en las mujeres la respuesta emocional que causan los celos exclusivamente por el ser amado es tan parecido a lo que podemos ver y sentir cuando un rio fluye, no lo vamos a podemos detener nunca, simplemente podemos apreciar su belleza, disfrutar de la abundancia de sus emociones y aprender a fluir a su lado. “RESPIRA, ADMIRA SU BELLEZA; AMA, DISFRUTA DE VIVIRLO, SIENTE CADA MOVIMIENTO Y CADA CARICIA, ESCUCHA CADA SUSURRO QUE ES MUSICA Y ARRULLO, EXTASIATE, DEJATE ENVOLVER; VUELVETE A ENAMORAR Y SE CREATIVO.”-Anónimo-

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lunes, 4 de julio de 2022

LOS CELOS

 


COLUMNA: ESTAMOS EN CONEXIÓN

LOS CELOS

Por: Jorge García D.

 

“Los Celos en el romance son como sal en los alimentos. Una pizca nunca viene mal, un toque, talvez mejore el sabor de los alimentos, sin embargo, abusar de ella puede estropear el placer del paladar y, bajo ciertas circunstancias, puede poner en peligro la vida” -Maya Ángelo-

 

Los celos son un sentimiento de malestar causados por la sospecha o temor que la persona amada, le sea infiel de manera sexual, emocional o en pensamiento, es esa sensación de malestar al sentir que el amor, la pasión, el afecto, cariño y atenciones se trasladan a otra persona; creándose en nosotros como consecuencia, esa necesidad de reafirmar que la persona que celamos es nuestra y nos pertenece, surgiendo un exagerado afán de posesión de forma exclusiva. Los celos, por lo tanto, son una respuesta emocional que pretende proteger ese elemento que se considera bajo amenaza o perdida. Los celos no son un sentimiento exclusivo de las relaciones de pareja, existen celos con los padres, entre hermanos, miembros de la familia, amigos, compañeros, colegas, en lo profesional y social.

 

Los celos, como el resto de las emociones (tristeza, alegría, frustración, enojo, miedo, ira) forman parte del ser humano. Sentir celos de forma moderada no es sinónimo de estar trastornado, pero se convierte en algo patológico cuando la sensación de malestar es tan absorbente que interfiere negativamente en nuestras relaciones afectivas, amorosas, y en el bienestar personal.

 

PERO, ¿QUÉ SON LOS CELOS? Los celos son una señal que me informa subconscientemente del peligro latente de perder el cariño del ser amado, por la presencia de un tercero, junto con la sensación de sentirse excluido y abandonado, y perder esa exclusividad que no poseemos.

 

¿CUÁLES SON LAS CONDUCTAS DE LAS PERSONAS CELOSAS? Los celos comienzan con una sutil desconfianza de que la pareja o la persona amada sea infiel. Esta duda produce tal angustia que lleva a un estado de vigilancia o desconfianza constante.

 

Al principio la conducta más frecuente es hacer una serie de preguntas que parecen inocentes, para averiguar qué hizo la pareja cuando él o ella no estaba, no se vieron, o están distanciados por diversas causas, surgiendo diversos cuestionamientos, cómo: ¿Qué hiciste? ¿Con quién estuviste, ¿A dónde fuiste?, ¿Con quién hablaste?... Y es en esta primera etapa, que la pareja se esfuerza en explicar con detalle todas sus acciones para convencer y despejar las dudas totalmente infundadas, siendo un error, lo cual sería mejor tomarse el tiempo para hablarlo y discutir de dónde o por qué surge esta desconfianza, pues raramente se llega a convencer y las dudas persisten con del paso del tiempo.

 

Donde el celoso comienza una nueva conducta de atención y vigilancia: registro de bolsillos, constantes llamadas telefónicas, mensajes, visualización, stalkeo o hasta hackeo de cuentas personales, redes sociales, correos, horarios, seguimientos, revisión de la ropa, aromas, etc., todo en busca de signos de infidelidad; conductas comprobatorias que tienen como objetivo reducir la angustia provocada por los celos, logrando un alivio transitorio, volviendo repetirse el malestar, iniciando el mismo proceso y quizá más severo, con el paso del tiempo o situación.

 

Creando un clima emocional de angustia, donde el celoso dedica parte de su tiempo a comprobar la veracidad de sus sospechas, que en la mayoría son infundadas, llegando a interferir en el desarrollo de su vida personal, cotidiana, de pareja, familiar, laboral, de armonía, amor, y confianza; provocando desconfianza, tristeza, depresión, angustia, ira, enojo, situaciones insostenibles que terminan por desintegrar la relación de pareja, con pensamientos distorsionados e irracionales; miedos que llevan a intentar controlar la pareja, pretendiendo alcanzar una seguridad que reafirme la relación.

 

Sin embargo, los celos en algunas ocasiones o en medida, pueden ayudar a gestionar la relación de pareja, dar una actitud de jugueteo, que enfocada de una manera que pueda ser aceptable no llega a ser nociva. De hecho, tener un poco de celos puede ser indicativo de que alguien se preocupa por su pareja; que verdaderamente le interesa cómo este o si le haya pasado algo, si pudiera ayudar o apoyar en cualquier tipo de circunstancia, como un indicativo de “Estoy aquí para ti, a la hora que sea, sabes que cuentas conmigo”, en este sentido, pueden ser positivos, ya que nos estimulan a cuidar nuestra relación, procurar a nuestra pareja, y ser compañero/a de vida. Tener celos no es necesariamente malo en sí mismo, pero sino se controla puede ser perjudicial.

 

QUÉ HACER, SI SIENTES CELOS O SE RECONOCEN CELOS EN LA PAREJA. Primeramente, debemos asumir que sentir celos es lo más natural entre los seres humanos, porque son parte de nuestras emociones, decir que -sientes celos- y abrir este tema con mi pareja, sin duda no es tarea fácil y mucho menos un momento grato, porque significa abrirnos y mostrar nuestra fragilidad o vulnerabilidad, pero siempre es muy necesario y parte de la confianza que se vera fortalecida con la pareja, y decir las causas de esa angustia, d ese estado o de ese tipo de situación, la cual ayudara a ambos a entablar una relación de comprensión, entendimiento y confianza. Si ambos estamos en condiciones de hablarlo y entablar este dialogo, hacerlo, nos permitirá conducir la mirada a un balance global de la relación; es decir podremos pensar en qué es lo que está faltando entre nosotros, qué hemos descuidado, o qué se ha perdido... desembocando en un restablecer quienes somos dentro de nuestra relación, reconstruir y fortalecer o decidir qué hacer, y pedir ayuda profesional, siempre en búsqueda de estar mejor, felices, plenos y en armonía y sobre todo en pareja, estable, en amor y confianza.

 

¿CUÁLES SON LAS CAUSAS QUE ORIGINAN LOS CELOS? Todas las personas, en un momento dado, hemos sentido celos que pueden ser más o menos intensos, en función de diversos factores, pero principalmente de lo que los motiva. Algunos pueden ser:

·         Sentimiento de posesión hacia la pareja.

·         Miedo a perder a la persona amada.

·         Temor a estar solo o a no encontrar otra pareja.

·         Miedo real a no poder tener otra pareja.

·         Baja autoestima.

·         Problemas de apego en la infancia, ausencia de atención y escases de cariño.

·         Experiencias previas de engaños e infidelidades, mentiras y más.

·         Patrones afectivos mal aprendidos.

·         Desconfiar y compararse con las personas que rodean a la pareja o tienen contacto.

·         Considerar las relaciones o acciones anteriores de la pareja como amenaza constante.

 

RASGOS DE PERSONALIDAD DE LA PERSONA CELOSA Las personas celosas sufren un gran malestar emocional fruto de la desconfianza y de un exagerado afán de posesión, teniendo estos ciertos rasgos de personalidad característicos:

Son inseguros. Son muy desconfiados. Tienen baja autoestima. Suelen ser introvertidos, reprimir sentimientos, emociones o externar su malestar. Experiencias malas recurrentes.

 

EXISTEN TRES TIPOS MUY DIFERENCIADOS DE CELOS:

·         Celos reactivos: son los que se producen como respuesta a un estímulo externo de amigos, ex parejas, familia, comentarios o hasta por la misma pareja, con comentarios o acciones.

·         Celos ansiosos: son celos basados en un temor infundado. Son los más comunes, y generan una sensación de suspicacia y falta de confianza en la pareja.

·         Celos posesivos: basados en la creencia que la pareja nos pertenece. Son especialmente perjudiciales, ya que se limita la libertad de la pareja, derivando en actitudes hostiles.

 

¿CÓMO SE PUEDEN TRATAR LOS PROBLEMAS DE CELOS EN LA PAREJA? Cuando los celos empiezan a deteriorar la relación de pareja, es necesario acudir con un profesional que nos ayude, determinando cuál es su causa; solo así podremos empezar a buscar una solución efectiva que nos permita ponerles fin o, al menos, controlarlos. Trabajar la autoestima, tener una buena comunicación, fortalecer la confianza y edificar una nueva relación basada en el amor, confianza, plenitud, convivencia, comunicación, sexo, cariño, aceptación del otro, toma de decisiones compartidas, y atención.

“En los hombres y en las mujeres la respuesta emocional que causan los celos exclusivamente por el ser amado es tan parecido a lo que podemos ver y sentir cuando un rio fluye, no lo vamos a podemos detener nunca, simplemente podemos apreciar su belleza, disfrutar de la abundancia de sus emociones y aprender a fluir a su lado. “RESPIRA, ADMIRA SU BELLEZA; AMA, DISFRUTA DE VIVIRLO, SIENTE CADA MOVIMIENTO Y CADA CARICIA, ESCUCHA CADA SUSURRO QUE ES MUSICA Y ARRULLO, EXTASIATE, DEJATE ENVOLVER; VUELVETE A ENAMORAR Y SE CREATIVO.”-Anónimo-

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