23/03/21
“LAS TERTULIAS DE LA CHIVA”
¡¡¡Hola amigos!!! ¡¡¡¡¡ Ya estoy de vuelta al ruedo!!!! Y quiero comentar que estoy con una cierta
nostalgia, ustedes me dirán si están de acuerdo conmigo o tal vez solo sea yo la que anda con ese
sentimiento.
En días pasados falleció un icono de la infancia de todos los que somos chavorrucos, a cuantos en
nuestra infancia cada cumpleaños nos festejaban con las mañanitas de Ricardo González mejor
conocido por su maquillaje de payasito “Cepillín” ¡¡¡ufff!!!! Me sabía todas, todas sus canciones,
tenía todos sus discos, tengo un autógrafo y fui varias veces a su circo cuando lo traía a tierras
poblanas.
Muchos si no tenían sus discos se chutaban sus canciones en algún bailable de la escuela por el día
de la madre, el día de la primavera o en alguna fiesta infantil de esa época, porque hoy en día: ¡¡¡ ya
ni fiestas infantiles hay!!! y si es que llega haber; las amenizan con canciones de Lady Gaga o Shakira,
¡¡¡qué buenos tiempos los nuestros!!!
Quien no recuerda las canciones: “El bosque de la China”, “Tomás”, “Payasito de la Tele”, “Vamos a
la escuela”, “La feria de Cepillin”, “Un día con mamá”, “Tamborileiro” (que muchos años después
supe que era de origen español y cantado por los estudiantes universitarios de grupos llamados atún
o tuna, y que en México las llamamos estudiantinas)
Pero no es solo eso de decirle adiós a un símbolo de mi infancia, no queridos amigos ahora súmenle
que nuestro zócalo poblano lo van a remodelar, y entonces será otro recuerdo que tendremos que
guardarlo en el baúl de nuestra memoria de la niñez poblana.
La verdad; no se si sea necesario esa remodelación, pero no quiero entrar en temas políticos ni
mucho menos, solo quiero decir que cada metro cuadrado que cambien, estarán llevándose un
recuerdo de mi niñez, para ir a la primaria todas las mañanas tenía que cruzar el zócalo, así por 4
años que duré en mi bella primaria que se encontraba en la 9 oriente entre la 16 de septiembre y
casi esquina con la 2 sur. Estaba casi pegada al colegio Esparza y tanto por las mañanas como en la
salida era forzoso pasar por el zócalo y ver cada árbol, cada loseta cerca de la fuente o simplemente
correr a la fuente de San Miguel a tocar el agua que para nosotros era una delicia.
Esos recuerdos ni con remodelaciones o tributos nos los borrarán de nuestra memoria, y aunque
me llene de nostalgia tengo que aceptar que la vida pasa, todo cambia y que mientas estemos vivos
tenemos que seguir llenando de recuerdos nuestra mente.
Y no podría irme sin antes recordar a Cepillin con la canción que amaba escuchar de niña pero al
mismo tiempo me llenaba de tristeza e impotencia por no saber que haría yo, si fuese una gallinita
a la que sus compañeras le hacen bullying por no tener mamá (hoy en día suena escabroso pero en
los ochentas era lo máximo) “La Gallinita co-co-ua”:
“Cuando me levanto a las gallinitas
Oigo cantar y sin hacer ruido a
Su gallinero me gusta entrar todas se
Alborotan y alegres cantan su co co ua”
“Todas menos una que callada siempre
Esta cuando era pequeña su mamá
Se fue y ella muy solita se quedó
Y esta cancioncita no pudo aprender
Y de tristeza llora en su rincón”
“Co co ua ua, co co ua ua
Co co co co ua”
Hasta aquí llegamos en Las Tertulias de la Chiva de este día, tenemos una cita para la próxima
semana, cuídense y no duden en mandar sus comentarios, que los tomaré en cuenta ya que con las
críticas siempre se aprende.
Adiós
CHIVA QUEEN- Columnista
Tw - @sylviatowers
Fb - @chivaqueen
Excelente tu narrativa como siempre tan profesional saludos amiga
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