martes, 24 de junio de 2014

México va contra su historia. Por: Josué Ortiz.

















Luego de los titubeos, o más bien descalabros con los que se llegaron al Mundial, quién (o  por lo menos yo) iba a pensar que México calificaría mostrando un futbol convincente, y que ilusiona nuevamente a una afición ávida de triunfo como la mexicana.
El combinado azteca ha venido de menos a más. Luego de un triunfo en su debut en la Copa del Mundo ante Camerún, que más que tres puntos dejó confianza y tranquilidad para afrontar su siguiente reto  ante Brasil, una selección en comparación a sus antecesoras, que en el papel no espanta a nadie, pero que no deja de ser la histórica pentacampeona mundial.
Con una actuación sobresaliente de Francisco Ochoa, México sorteó la prueba con un empate que hizo vibrar a un país y continuaba su crecimiento al obtener el primer punto contra esta selección en una copa del mundo, con miras a una virtual calificación, aunque aún faltaba afinar detalles, ya que con un gol en su cuenta, quién pensaría que tendría esos argumentos ofensivos para concretar la tarea primaria de obtener el pase a la segunda ronda, y más contra un equipo que se ha distinguido por su buen futbol como Croacia.
La confianza de los croatas era de miedo, ellos juraban que a los aztecas se les doblarían las piernas; en contraparte, los mexicanos se mantuvieron firmes ante las provocaciones y continuaron con su preparación.
El momento de ir contra la historia llegó. Tras un primer tiempo parejo, los mexicanos sacaron la casta, y mantuvieron a raya a las estrellas croatas como Mandzukic, delantero de Bayern Munich,  o el mismo Modric (medio del Real Madrid) o Rakitic (nueva contratación del Barcelona) entre otros, para que en la recta final del encuentro apareciera Rafael Márquez, si el capitán mexicano que se ha distinguido por perder la calma en los peores momentos del Tri, pero que hoy olvidó su pasado y forjó una nueva historia con un cabezazo que abrió la cuenta.
A partir de ese momento, México fue el amo y señor, y concretó ese estatus, con goles de Andrés Guardado y Chicharito Hernández, que dicho sea de paso, este último rompió un ayuno de un año sin gol en el Tri.
Al final, el marcador de tres goles contra uno, colocaba a México en la segunda ronda como segundo de grupo,  donde enfrentará a la temible Holanda, la naranja mecánica, los creadores del futbol total, los eternos segundones de los mundiales, ( a no verdad) que mejor reto, para concretar una asignatura pendiente de más de 28 años ante un grande, y de paso darle una bofetada a la historia.  

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martes, 24 de junio de 2014

México va contra su historia. Por: Josué Ortiz.

















Luego de los titubeos, o más bien descalabros con los que se llegaron al Mundial, quién (o  por lo menos yo) iba a pensar que México calificaría mostrando un futbol convincente, y que ilusiona nuevamente a una afición ávida de triunfo como la mexicana.
El combinado azteca ha venido de menos a más. Luego de un triunfo en su debut en la Copa del Mundo ante Camerún, que más que tres puntos dejó confianza y tranquilidad para afrontar su siguiente reto  ante Brasil, una selección en comparación a sus antecesoras, que en el papel no espanta a nadie, pero que no deja de ser la histórica pentacampeona mundial.
Con una actuación sobresaliente de Francisco Ochoa, México sorteó la prueba con un empate que hizo vibrar a un país y continuaba su crecimiento al obtener el primer punto contra esta selección en una copa del mundo, con miras a una virtual calificación, aunque aún faltaba afinar detalles, ya que con un gol en su cuenta, quién pensaría que tendría esos argumentos ofensivos para concretar la tarea primaria de obtener el pase a la segunda ronda, y más contra un equipo que se ha distinguido por su buen futbol como Croacia.
La confianza de los croatas era de miedo, ellos juraban que a los aztecas se les doblarían las piernas; en contraparte, los mexicanos se mantuvieron firmes ante las provocaciones y continuaron con su preparación.
El momento de ir contra la historia llegó. Tras un primer tiempo parejo, los mexicanos sacaron la casta, y mantuvieron a raya a las estrellas croatas como Mandzukic, delantero de Bayern Munich,  o el mismo Modric (medio del Real Madrid) o Rakitic (nueva contratación del Barcelona) entre otros, para que en la recta final del encuentro apareciera Rafael Márquez, si el capitán mexicano que se ha distinguido por perder la calma en los peores momentos del Tri, pero que hoy olvidó su pasado y forjó una nueva historia con un cabezazo que abrió la cuenta.
A partir de ese momento, México fue el amo y señor, y concretó ese estatus, con goles de Andrés Guardado y Chicharito Hernández, que dicho sea de paso, este último rompió un ayuno de un año sin gol en el Tri.
Al final, el marcador de tres goles contra uno, colocaba a México en la segunda ronda como segundo de grupo,  donde enfrentará a la temible Holanda, la naranja mecánica, los creadores del futbol total, los eternos segundones de los mundiales, ( a no verdad) que mejor reto, para concretar una asignatura pendiente de más de 28 años ante un grande, y de paso darle una bofetada a la historia.  

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