Hoy México se está transformando, y lo ha logrado en democracia, a partir del diálogo, la pluralidad y los acuerdos que México necesitaba.
Por lo que derivado del Pacto por México se han concretado en los primeros 20 meses de esta administración, las 11 reformas estructurales que serán la base para que nuestro país logre un crecimiento económico más acelerado, sostenido e incluyente; en beneficio de todos los mexicanos.
Cada una de estas reformas tiene fines específicos que contribuyen directamente a que todos los mexicanos tengan una mejor calidad de vida y se combatan las grandes desigualdades que existen en nuestro país.
Siendo así, la Reforma Energética, permite garantizar no sólo el abasto y precios competitivos de los recursos energéticos sino modernizar este sector para detonar inversión, crecimiento económico y creación de empleos.
Por su parte, la Reforma en Materia de Competencia Económica consiente regular la relación entre las empresas, y así asegurar la competencia de forma leal y sana.
También, la Reforma en Materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión fomenta la inclusión de la población al permitir cerrar la brecha digital, integrando a la población plenamente a la sociedad del conocimiento.
Asimismo, la Reforma Hacendaria permite incentivar a la formalidad, pero también, incrementar de manera justa la recaudación y poder otorgar mayores recursos a la atención de las necesidades prioritarias de la población mexicana.
La Reforma Financiera, por su parte, crea las condiciones para que los hogares y las empresas en México cuenten con más crédito y más barato.
Además, la Reforma Laboral estimula la formalidad y facilita el desarrollo profesionalmente de miles de hombres y mujeres, los cuales además contarán con mayores herramientas para triunfar en un mundo globalizado gracias a la Reforma Educativa, que permite garantizar el ejercicio del derecho de los niños y jóvenes a una educación integral, incluyente y de calidad.
Por su parte, la Nueva Ley de Amparo fortalece los mecanismos, evitando los abusos por parte de los poderes públicos. Además, gracias al Código Nacional de Procedimientos Penales todos los mexicanos seremos juzgados con los mismos procedimientos sin importar el país en el que nos encontremos, garantizando nuestros derechos.
Del mismo modo, la Reforma Política-Electoral consolida la democracia al promover una mayor colaboración entre los poderes fomentando la participación ciudadana y brindando mayor certidumbre, equidad y transparencia; sustentándose en la Reforma en Materia de Transparencia, que permitirá llevar a cabo cambios sustantivos para fomenta la transparencia y la rendición de cuentas.
Siendo principalmente la democracia y el diálogo lo que ha permitido consolidar estas reformas que permitirán alcanzar objetivos claves para el desarrollo sostenido e incluyente, al propiciar que se eleve la productividad del país para impulsar el crecimiento económico, fortalecer y ampliar los derechos de los mexicanos y afianzar nuestro régimen democrático y de libertades.
En este esfuerzo colectivo, el Gobierno de la República asumió el compromiso con toda la sociedad mexicana, con el fin de llevar a México hacia la paz, la inclusión, la prosperidad, el bienestar además de promover y consolidar la democracia a través del diálogo.
Ahora, nos corresponde a todos los mexicanos asumir nuestra responsabilidad al prepararnos para competir y ser exitosos, y colaborar en esta nueva etapa de crecimiento, para que todos los mexicanos puedan contar con mejores niveles de bienestar y el pleno goce de los derechos.
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