martes, 24 de mayo de 2016

Caras y Gestos Por Marco Antonio Juárez García


Con una verdadera guerra sucia que en muchos años no se había vivido  en Puebla, las candidaturas a la gubernatura del estado entran prácticamente a la recta final, pues son menos de 15 días los que faltan para el día 5 de junio, fecha en la que los poblanos habrán de decidir a quién de las tres candidatas o dos candidatos les otorgan el cargo de gobernador del estado por 1 año 8 meses. Dos de estos personajes cargando con la incompetencia y lo incapaz que son algunos de sus más cercanos colaboradores en un madero que finalmente serán crucificados a falta de propuestas ciudadanas y verdaderos compromisos con la gente, con un pueblo  que ya está cansado de escuchar siempre en campañas electorales la misma cantaleta. Me parece que tanto las candidatas y los candidatos son sensatos en su deseo de servir desde esta alta tribuna a los poblanos; sin embargo ésta guerra de lodo no deja ver a los electores con el cristal de la verdad sino a través de los medios son obligados a sumergirse en la obscuridad, el chantaje y la calumnia, en donde prevalece la perversidad y ataques, que solo dejan ver la ineptitud de quien pretende a la mala gobernar a un pueblo, que de entrada, está lastimado por el autoritarismo y el abuso de poder que ha prevalecido en el gobierno los últimos 5 años. ¿Qué tenemos en vez de propuestas? guerras de lodo, justo cuando el ciudadano, lo quiere saber es cómo, qué y cuándo van a solucionar o amenguar sus necesidades olvidándose del egoísmo que siempre envuelve a los políticos, pensando verdaderamente en las carencias de la gente y salir de esa vergonzante estadística, que revela que en Puebla estamos jodidos el 70 por ciento y solo el 30 vive en la opulencia y la riqueza. Y en vez, que en estas campañas, se utilice un argumento convincente, no al contrario,  son las mismas promesas de todos los candidatos anteriores, dando paso y privilegiando éstas guerras de lodo. ¿Y qué escuchamos? Que si Blanca Alcalá, tiene propiedades por más de 110 millones de pesos y no las declaro en su 3 de 3, que si Tony Gali, se volvió millonario al arropo de Rafael Moreno Valle, logrando una gran cadena de antros y negocios en Puebla, Cholula y hasta en Sudamérica, que si Roxana Luna posee un edificio de tantos pisos construido a base de tráfico de influencias, que si el maestro Abraham Quiroz, es muy famoso por lo desconocido que es, que si Ana Teresa Aranda, actúa bajo un acuerdo para beneficiar a Blanca Alcalá, y en fin una serie de acusaciones y señalamientos que en nada benefician a los poblanos que finalmente, más allá de discursos huecos, les salen debiendo una verdadera propuesta. Y es que quizá todo esto tenga una razón, que en 1 año 8 meses, no se pueda cumplir o cubrir las necesidades de una Puebla, que ha sido engañada, por los principales actores de ésta película, los medios de comunicación. Regalar tinacos para miles de litros de agua en donde carecen del vital liquido, es absurdo, ofrecer computadoras en donde no hay luz eléctrica, es una burla y ofrecer educación de calidad a quienes no tienen una alimentación, por lo menos básica, para aprovechar su estudio y asimilarlo, es no tener madre.

En fin de acuerdo al libro titulado “Las Guerras de Lodo” de la autoría de nuestro amigo el licenciado en derecho y periodista Manuel Carmona Sosa, las guerras de lodo o guerras sucias, son un recuento ágil, histórico y actual no solo de la descarnada lucha política que se da de cara a la opinión pública, sino de todo lo que no se ve y que se plantea tras bambalinas. Dice que la contracampaña es mucho más barata, sus efectos son inmediatos  e implica un mínimo esfuerzo; pero eso sí, se requieren de fuertes dosis de perversidad, audacia y mucha, pero mucha imaginación y  asegura que “Las Guerras de Lodo” son y serán parte de la democracia, una democracia que aun está en pañales, sobre todo en nuestro país. Les recomiendo este libro, muy oportuno a estos tiempos que corren, en donde la competencia política se da sin tregua ni cuartel;  la lectura de esta obra es obligada para quien quiera conocer los efectos que ha tenido la contrapropaganda, sin duda el arma secreta de los grandes estrategas en el mundo que han cambiado el rumbo de la historia.  Pero finalmente usted tendrá su propia opinión amigo lector, si cabe un consejo y me lo permite, únicamente me resta decirle que no se dejen llevar por las campañas sucias y acepten lo que les regalen, pero voten por quien realmente les parezca el o la mejor. Hasta la próxima.   

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martes, 24 de mayo de 2016

Caras y Gestos Por Marco Antonio Juárez García


Con una verdadera guerra sucia que en muchos años no se había vivido  en Puebla, las candidaturas a la gubernatura del estado entran prácticamente a la recta final, pues son menos de 15 días los que faltan para el día 5 de junio, fecha en la que los poblanos habrán de decidir a quién de las tres candidatas o dos candidatos les otorgan el cargo de gobernador del estado por 1 año 8 meses. Dos de estos personajes cargando con la incompetencia y lo incapaz que son algunos de sus más cercanos colaboradores en un madero que finalmente serán crucificados a falta de propuestas ciudadanas y verdaderos compromisos con la gente, con un pueblo  que ya está cansado de escuchar siempre en campañas electorales la misma cantaleta. Me parece que tanto las candidatas y los candidatos son sensatos en su deseo de servir desde esta alta tribuna a los poblanos; sin embargo ésta guerra de lodo no deja ver a los electores con el cristal de la verdad sino a través de los medios son obligados a sumergirse en la obscuridad, el chantaje y la calumnia, en donde prevalece la perversidad y ataques, que solo dejan ver la ineptitud de quien pretende a la mala gobernar a un pueblo, que de entrada, está lastimado por el autoritarismo y el abuso de poder que ha prevalecido en el gobierno los últimos 5 años. ¿Qué tenemos en vez de propuestas? guerras de lodo, justo cuando el ciudadano, lo quiere saber es cómo, qué y cuándo van a solucionar o amenguar sus necesidades olvidándose del egoísmo que siempre envuelve a los políticos, pensando verdaderamente en las carencias de la gente y salir de esa vergonzante estadística, que revela que en Puebla estamos jodidos el 70 por ciento y solo el 30 vive en la opulencia y la riqueza. Y en vez, que en estas campañas, se utilice un argumento convincente, no al contrario,  son las mismas promesas de todos los candidatos anteriores, dando paso y privilegiando éstas guerras de lodo. ¿Y qué escuchamos? Que si Blanca Alcalá, tiene propiedades por más de 110 millones de pesos y no las declaro en su 3 de 3, que si Tony Gali, se volvió millonario al arropo de Rafael Moreno Valle, logrando una gran cadena de antros y negocios en Puebla, Cholula y hasta en Sudamérica, que si Roxana Luna posee un edificio de tantos pisos construido a base de tráfico de influencias, que si el maestro Abraham Quiroz, es muy famoso por lo desconocido que es, que si Ana Teresa Aranda, actúa bajo un acuerdo para beneficiar a Blanca Alcalá, y en fin una serie de acusaciones y señalamientos que en nada benefician a los poblanos que finalmente, más allá de discursos huecos, les salen debiendo una verdadera propuesta. Y es que quizá todo esto tenga una razón, que en 1 año 8 meses, no se pueda cumplir o cubrir las necesidades de una Puebla, que ha sido engañada, por los principales actores de ésta película, los medios de comunicación. Regalar tinacos para miles de litros de agua en donde carecen del vital liquido, es absurdo, ofrecer computadoras en donde no hay luz eléctrica, es una burla y ofrecer educación de calidad a quienes no tienen una alimentación, por lo menos básica, para aprovechar su estudio y asimilarlo, es no tener madre.

En fin de acuerdo al libro titulado “Las Guerras de Lodo” de la autoría de nuestro amigo el licenciado en derecho y periodista Manuel Carmona Sosa, las guerras de lodo o guerras sucias, son un recuento ágil, histórico y actual no solo de la descarnada lucha política que se da de cara a la opinión pública, sino de todo lo que no se ve y que se plantea tras bambalinas. Dice que la contracampaña es mucho más barata, sus efectos son inmediatos  e implica un mínimo esfuerzo; pero eso sí, se requieren de fuertes dosis de perversidad, audacia y mucha, pero mucha imaginación y  asegura que “Las Guerras de Lodo” son y serán parte de la democracia, una democracia que aun está en pañales, sobre todo en nuestro país. Les recomiendo este libro, muy oportuno a estos tiempos que corren, en donde la competencia política se da sin tregua ni cuartel;  la lectura de esta obra es obligada para quien quiera conocer los efectos que ha tenido la contrapropaganda, sin duda el arma secreta de los grandes estrategas en el mundo que han cambiado el rumbo de la historia.  Pero finalmente usted tendrá su propia opinión amigo lector, si cabe un consejo y me lo permite, únicamente me resta decirle que no se dejen llevar por las campañas sucias y acepten lo que les regalen, pero voten por quien realmente les parezca el o la mejor. Hasta la próxima.   

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