Esparza de Lobomanía a Reelección y en 2018… ¿Casa Puebla? Por Gerardo Pérez García

24 de Mayo 2017

El hombre y sus circunstancias.
O bien, las circunstancias y el hombre.
Ese parece ser el sino de Alfonso Esparza Ortiz, que se convirtió en EL PRIMER RECTOR de la BUAP, después de 60 años de transitar como Universidad Autónoma, en ser electo -2013- habiendo un gobierno del PAN, pues los anteriores titulares llegaron con mandatarios tutelados por el Revolucionario Institucional.
Y de estar en pleno festejo por los 80 años del nacimiento de la Universidad de Puebla –se creó en 1937 por Decreto del entonces gobernador Maximino Ávila Camacho-
Por lo que el gobernador Antonio Gali Fayad acudió –este lunes- a la Máxima Aula Universitaria a entregarle al Rector Alfondo Esparza la Clavis Palafoxiana; y el Presidente Municipal de la Capital, Luis Banck Serrato, le dio la Cédula Real de la Fundación de Puebla. 
Acotándose:

Los rectores han sido, y son electos -primero por la Junta de Gobierno-, por el Consejo Universitario.
Cuya Autonomía Universitaria ha sido –y es- respetada por el gobernante en turno, como fue desde el mandato de Fausto M. Ortega -1957/1960- hasta el actual Gali Fayad.

Mención especial y son parte de otra historia los generales Antonio Nava Castillo y Rafael Moreno Valle, quienes tuvieron que separarse del cargo de Gobernador ante la intromisión que hubo en la vida universitaria; y la mano del ex Presidente Luis Echeverría Álvarez.

Sin olvidar la “regla de oro no escrita”:
“Gobernador… NO PONE Rector en la BUAP”.
-Pero- “SÍ TIENE… Derecho de Veto”.

Pues bien, Alfonso Esparza pasará a la historia de la vida rectoral de la Máxima Casa de Estudios, como de Puebla, al lograr que el equipo universitario Lobos-BUAP se haya coronado en la Liga de Ascenso.

Y que hoy la Benemérita cuente con un equipo de Primera División.
De ahí la cita: el hombre y sus circunstancias; y las circunstancias y el hombre.
Sí, mayo de 2017 se corona Lobos y entra al máximo circuito nacional del futbol.
Y cuatro meses después, en octubre venidero, Alfonso Esparza irá por la Reelección del Rectorado.

El camino para un segundo periodo de cuatro años -2017/2021- nadie, absolutamente nadie, se lo podrá pelear o quitar.
Y lo hará, por segunda ocasión, con un titular del Poder Ejecutivo del Partido Acción Nacional.

Primero fue Rafael Moreno Valle.
Ahora es José Antonio Gali Fayad.
De lograrlo, como todo hace indicar que así será, se le abrirá un nuevo ventanal.
Y ése será cien por ciento político.
¿Cuál?

LAS CIRCUNSTANCIAS DEL 
2018 SE LE ABREN AL RECTOR

Las circunstancias y el hombre; el hombre y sus circunstancias.
Ante el vendaval político que vive el país y donde los partidos cada vez son más y más rechazados por la ciudadanía, que no dudan en calificar de corruptos a los políticos y gobernantes, se abre la oportunidad y acceso para gente que no está ligada ha partido alguno.

Y es donde las circunstancias políticas jugarán a favor de Alfonso Esparza Ortiz en 2018.

El camino para Casa Puebla estaría más que allanado.
Ya sea que fuera como candidato Independiente.
O postulado por algún partido.
Puebla y los poblanos verían una nueva expectativa de gobierno con Alfonso Esparza.

Ahí está su obra en la BUAP.
Son hechos y no palabras.
Su conexión con ese vital, importante y trascedente sector juvenil y universitario lo tiene.

Son más de ¡80 mil estudiantes y 10 mil catedráticos y trabajadores administrativos!
Por algo la Presidencia de México tiene al ex Rector de la UNAM, hoy Secretario de Salud, José Narro Robles, como “el caballo negro” para la candidatura Presidencial de 2018.

Vale especificar:

Esparza Ortiz nunca ha comentado, menos declarado, interés alguno por un cargo de elección popular.

Como también jamás hizo referencia alguna que buscaría la Rectoría Universitaria.
Simple y sencillamente es el hombre y sus circunstancias; las circunstancias y el hombre.
Don Alfonso estuvo en el lugar indicado, y en el momento indicado, para ser nombrado Rector Sustituto.

Después la comunidad universitaria lo eligió para un primer Rectorado en octubre de 2013.
Y antes de concluir su primera administración… Lobos-BUAP se corona y asciende a la Primera División.

Y ello no lo consiguieron sus antecesores –José Dóger Corte, Enrique Dóger Guerrero y Enrique Agüera Ibáñez-
Amén de que Esparza logró concatenar la actividad académica, su desarrollo y expansión con la espera deportiva.

Ese es y será el plus político que tendrá en el año político del 2018.

NO ME ESPANTA LA PRIMERA DIVISIÓN

¿Quién iba a pensar que el equipo universitario que juagaba sus partidos de la Segunda División en la cancha polvorienta de la prepa Benito Juárez –en San Manuel- iba a estar en la Máximo Circuito?
¿Quién se imaginó, pese haber ascendido -2007-  a la Liga de Ascenso, Lobos daría el salto?
¿Quién creía en Lobos?
Nadie…

Salvo el Rector y la comunidad universitaria.
El tino de crear el Patronato y la visión de Luz Esparza para saber administrar, contratar jugadores y director técnico.
Y el pasado sábado se desató la Jauría en tierras sinaloenses y logró la corona.
El remar a contra-corriente es el sino de Esparza.

No es hombre que guste de aparecer en la prensa. Tampoco de reflectores y cámaras.

Ni de tener cortesanos y aplaudidores.
Siempre ha optado por la sencillez y la calidez.
Su trabajo es callado. 
Y honra la palabra.

No lo ven… pero se siente su mano.
Supo convivir con el gobierno morenovallista. Abrió las puertas a las corrientes políticas internas y externas.

Ahora con el ventanal de ser el primer Rector en logar el ascenso del equipo de futbol, no dudó en afirmar:

“Se tiene lo suficiente para trascender”. 

“No me espanta la Primera División. Tenemos el estadio. Tenemos la afición.”
Pero sobre todo… “tenemos el corazón”.

El hombre y sus circunstancias.

O bien, las circunstancias y el hombre.

Nadie apostaba que Alfonso Esparza sería Rector… y lo es.
Nadie apostaba que Lobos obtendría el ascenso… y ascendió.
Va por la Reelección del Rectorado de la BUAP en octubre… y se reelegirá.
De ahí la interrogante:

¿Hoy, alguien apuesta que Esparza Ortiz sea candidato al Gobierno de Puebla en 2018?
La mesa y el capital político-electoral está puesta.

Al tiempo.