Hace unas semanas mencionaba en una de mis columnas que Chivas, Cruz Azul y Tigres eran los equipos que veía más fuertes para ganar el campeonato.
Mi pronóstico, no estuvo tan mal, ya que hoy, podemos ver que el equipo regiomontano, con base en su experiencia de sus jugadores y la dirección de Ricardo Ferretti es el favorito para coronarse.
La última ocasión que lo realizó fue en 1982, cuando derrotó a los Potros de Hierro del Atlante, en un partido disputado en el estadio Azteca y que mi padre me cuenta con agrado que estuvo presente.
El equipo felino se medirá en el juego final ante Santos de Torreón, un cuadro que pasó muchos problemas en el inicio del campeonato, al grado de costarle el puesto a su otrora entrenador Diego Cocca, para que el equipo recayera en las manos de Benjamín Galindo.
Galindo tuvo a bien, llegar y no sólo imponer su estilo, sino de reunificar a un vestidor que estaba más que roto. Los frutos de este acto se están dando, y ahora Santos buscará llevar otro trofeo a sus vitrinas.
Sin embargo, la misión para los de Torreón luce complicada, y es que no quiero parecer aguafiestas pero los números nos indican que Tigres no pierde en Torreón desde 2004, añadiendo a que cuentan con la mejor defensa del torneo, una de las mejores ofensivas, y cierran en su estadio, Santos necesitará un auténtico milagro.
Ya lo vimos contra Morelia, el equipo de Galindo sufrió bastante tanto en la ida y sobre todo en la vuelta, ante un equipo que terminó jugando con nueve hombres y que por poco les alcanza para sacar el partido.
Por todo esto y más, creo que Tigres tiene todo para terminar el ayuno de más de 29 años sin campeonato, un largo periodo para una afición que se entrega en las tribunas del estadio cada temporada y que se muere en la raya por su equipo en cada partido, no importando si es uno de temporada regular a uno de final.
Cambiando de tema, que lástima que Javier Hernández , cuando parecía que volvía retomar su nivel, haya vuelto a lesionarse, y lo peor es que fue solo.
El Chicharito tendrá que ponerse las pilas en su recuperación, ya que pese a ser el hijo favorito de Alex Fergusson, varios jóvenes promesas como Danny Welbeck han mostrado cualidades suficientes como para pelear por la titularidad con los Red Devils.
Finalmente, no podría dejar pasar el campeonato de Boca Juniors. Los Xeneises golearon a Bandfield por tres goles contra cero, para que a falta de dos fechas, alzaran la copa argentina.
Lo que más asombro me dio fue ver a un Darío Cvitanich, ex jugador del Pachuca, muy tranquilo, sereno y sobre todo contento, situación que se reflejó dentro del campo.
Además, el señor Cvitanich, al final del encuentro tuvo a bien, copiar el buen gesto de Iker Casillas durante el Mundial, ya que tras ser entrevistado por Cecilia Benelli, una reportera de Fox Sports y quien es actualmente su novia del argentino, le plantó un beso en plena transmisión.
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