ÁLTER EGO

COLUMNA: ESTAMOS EN CONEXIÓN

ÁLTER EGO

Por: Jorge García D.

 

Mi otro yo es un yo que se atreve, que sueña, que se arriesga... es ese otro que existe, respira, siente, ama y sueña, aquel que no tiene miedos... ¡Es aquel al que observan, critican, envidian y finalmente imitan!

 

En ocasiones crear una personalidad alterna a la propia (álter ego), nos ayuda a atrevernos a hacer cosas inimaginables que en un estado natural no podríamos realizar, por diversas casusas como la pena, vergüenza, condicionamiento y escrutinio social, el qué dirán o simplemente el no atrevemos a comportarnos de una forma fuera de la tradicional.

 

Pero primeramente diferenciaremos entre ¿Qué es el ego y el álter ego?

Literalmente, el ego es el “yo”, mientras que el álter ego es el “otro yo”. Del primero somos conscientes, llámese personalidad, aquellos rasgos y cualidades que configuran la manera de ser de una persona y la diferencian de las demás. A diferencia del álter ego, que es el otro yo que habita más en nuestro mundo inconsciente

 

Pero, ¿Qué es el álter ego? El álter ego​​​ (que en latín significa «el otro yo») es un segundo yo, que se cree es distinto de la personalidad normal u original de una persona; este concepto se utiliza para nombrar a una personalidad en quien se tiene confianza absoluta, lo que permite que haga de uno mismo un yo, sin restricciones; personalidad que ya está dentro de ti y también se utiliza para referirse a los diferentes comportamientos de una persona que pueden aparecer en ciertas situaciones o enfrentándose a diversas circunstancias.

 

El álter ego es un concepto utilizado para referirse a una segunda personalidad o identidad de un individuo, con comportamientos, emociones, pensamientos y creencias distintas a las mostradas normalmente por la persona. Sin embargo, siempre se refiere a una segunda identidad mantenida, que es fácilmente diferenciable de la original.

 

Los motivos que pueden llevar a un individuo a crear un álter ego son muy variados. Esta segunda personalidad puede aparecer provocada por un trastorno mental, como el trastorno de identidad disociativo; sin embargo, esta no es la única causa, y ni siquiera la más común.

 

Diversas investigaciones mencionan que las personas pueden crear un álter ego como una forma de expresar sus deseos más ocultos. Ya sea de manera consciente o inconsciente, pudiendo imaginar una versión idealizada de sí mismo, que verá libre de los problemas o fallos de su propia identidad. Convirtiéndose a este personaje en una vía de escape para alcanzar diversos objetivos o viviendo la clase de existencia que no está a su alcance en el mundo real.

 

¿Es beneficioso o perjudicial tener un álter ego? La idea de tener una segunda personalidad o incluso tratar de crearla puede sonar muy extraño para la mayoría de la gente. Sin embargo, salvo que la aparición de un álter ego sea el resultado de un trastorno psicológico, las investigaciones dicen que poseer una identidad alternativa incluso podría ser beneficioso.

 

De hecho, algunos expertos están comenzando a recomendar la creación consciente de un álter ego para ayudar a las personas a superar sus miedos o las dificultades en su vida. Que forma parte de un tipo de enfoque conocido como “gamificación”, que pretende que los individuos afronten lo que les ocurre en su día a día como si se tratara de un juego.

 

Así, cuando una persona crea una identidad separada de la suya propia, puede intentar asumirla en los momentos en los que se siente bloqueada o no sabe qué hacer. Por ejemplo, alguien tímido podría inventarse una personalidad alternativa que fuera extrovertida, desinhibida y segura de sí, adoptándola en los momentos en que la necesite.

 

Por qué a todos nos haría bien tener un álter ego

Hoy en día, el término álter ego se usa para describir una segunda identidad, diferente a la del día a día. Pero, al igual que nuestras identidades principales, cada álter ego es único, con su propia historia de origen, su propia personalidad y carácter.

 

·    Adoptar un álter ego puede ser una forma de mejorar el desempeño. En estés caso deportistas, escritores, artistas, músicos, cantantes, actores, actrices, pueden crear nombres ficticios, que a los ojos de las personas tienen mayor fuerza, personalidad, sensualidad, bondad, sensualidad, poder o carácter, haciendo que ellos mismos adopten dichas características de este álter ego, sacando a relucir una personalidad alterna, con una identidad propia, que los hace que no dejen de ser quienes son, pero si que puedan sostener características que dé propia personalidad no poseen.

 

Los beneficios de usar un álter ego no se limitan al mundo del deporte, las artes, o el espectáculo, sino puede ser del común de las personas, la cual es una buena estrategia que puede también ayudar a liberar la fuerza creativa, innovadora y competitiva.

 

Un ejemplo de Álter Ego es: "Robbie Williams que es el nombre artístico del cantante Ingles quien se denomina así mismo como un superhéroe, desinhibido, atrevido, tenaz, arriesgado y muy poderoso en el escenario”, mientras que “Robert Peter Williams”, no Robbie Williams, es un padre normal que cría a sus 4 hijos, junto con su esposa y hace las cosas más comunes en su vida cotidiana.

 

¿Cómo crear un álter ego?

Al margen de las dificultades asociadas al trastorno de personalidad múltiple, tener un álter ego puede ser beneficioso por los motivos mencionados anteriormente.

 

De qué manera es posible crear una identidad alternativa que te ayude a enfrentarte a tu día a día de forma más eficaz. Primeramente, decide por qué quieres un álter ego, contestando a estas preguntas: ¿Qué quieres conseguir creando un álter ego? ¿Te gustaría ser más atrevido, extrovertido, o aumentar la confianza en ti mismo? ¿Deseas crear un personaje que te ayude a conseguir más clientes, o un círculo social más amplio?

 

·    Este tipo de preguntas te ayudarán a decidir cuál será la motivación principal de tu nueva identidad. Debido a que la estás creando para ayudarte, es necesario que tenga una misión, un propósito para el que la estás ideando, con ello Haz una lista de los rasgos que necesitas.

·    Una vez que tengas claro por qué estás creando a tu álter ego, es necesario que reflexiones sobre cómo tendrá que ser para cumplir con su objetivo, si lo que quieres es una nueva identidad que te ayude a trabajar más en tu negocio, esta tendría que contar con rasgos como la disciplina, la perseverancia o la capacidad de automotivarse.

 

La buena noticia es que puedes ser tan imaginativo como quieras en este punto. La idea es crear una versión idealizada de ti mismo, que pueda superar los retos a los que no te crees capaz de enfrentarte normalmente.

 

Recuerda que este álter ego, puede ayudarte a ser ese propio personaje que has soñado ser, siendo quizá más amigo, humano, sensible, artista, perceptivo, débil, consejero, compañero, voluntarioso, cariñoso, soñador, alguien que contrasta con tu forma de ser y actuar real.

 

La construcción de un álter ego es un recurso que a veces tiene fines terapéuticos. Ese otro yo puedo encargarse de hacer muchas de las cosas que el yo no haría. También es posible que se convierta en un complemento ideal para nuestra vida.

 

«No hace falta tener una visión de rayos X para ver que no estás haciendo nada bueno... Quizá por eso decidí volar en avión esta vez. La misma razón por la cual utilizo el tren o preparo café en la estufa, en lugar de hervir el agua con mis ojos. Porque no quiero olvidar nunca lo que significa ser humano» Clark Kent. Comic Superman #22.

 

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