QUÉ ES UNA FAMILIA
TÓXICA Y CÓMO SOBREVIVIR A ELLA
Por: Jorge García D.
“Las familias son como las ramas de un árbol, crecemos en diferentes
direcciones, pero nuestras raíces pertenecen como una sola en amor, apoyo,
aceptación, empatía, respeto y comprensión”
Las familias, en
cualquiera de sus estructuras actuales, son espacios primordiales, ya que
constituyen la base en la construcción de la identidad, la autoestima y los
esquemas de convivencia social; es donde las personas comienzan a descubrir el
mundo, a relacionarse, a interactuar con el entorno y a desarrollarse como personas
sociales.
Es un placer
saludarte desde la Columna de: “ESTAMOS EN CONEXIÓN”. Recuerda que este lunes tenemos nuestro
programa de radio número 114, de esta nueva temporada, una transmisión en vivo
en punto de las 17:00 horas a través de nuestra plataforma digital
www.radioenredes.com, así como nuestros en vivos a través de nuestras redes
sociales oficiales: Facebook y YouTube... Hoy hablaremos acerca de una
situación que nos atañe a todos, en diferentes dimensiones, situaciones y
experiencias todos hemos experimentado una relación familiar toxica, «En una familia tóxica, el
silencio puede ser más dañino que cualquier palabra hiriente. Recuerda que
mereces una comunicación respetuosa y abierta, donde tus sentimientos y
pensamientos sean valorados.» – Rollo May
La familia es considerada tradicionalmente como el núcleo
fundamental de la sociedad, un refugio de amor, apoyo y protección. Sin
embargo, no todas cumplen con esta imagen idílica. Hay algunas familias tóxicas
que constituyen un entorno no seguro, en el cual no existe la gestión emocional
y las relaciones son destructivas y limitantes. No obstante, y aunque no somos
muy fans de este tipo de etiquetas, entendemos lo que hay detrás de este
término y sabemos lo duro que puede ser vivir así.
El mejor lugar en
que pueden vivir niñas, niños y adolescentes es en una familia, en la que
experimenten una constante sensación de seguridad, protección, cuidados y la
confianza para encontrar apoyo al interior y fuera de esta. Es por ello que las
familias deben promover el desarrollo y la educación de sus integrantes bajo un
marco de valores que les permita respetar las diferencias en su proceso de
crecimiento hasta convertirse en personas adultas con los recursos, habilidades
y valores necesarios para que puedan enfrentar con éxito los retos de la vida.
El inicio de
nuestra vida depende, prácticamente en su totalidad, de las figuras que nos
cuidan, que son nuestras figuras de apego. Por ello es importante que nos
desarrollemos en un entorno que represente un “lugar seguro”. Los cuidados, la
atención, el cariño, la protección… son los que permiten que el niño crezca de
una forma sana y se convierta en una persona funcional. Pero ¿qué pasa si las
personas que tienen que cuidarnos no lo hacen o si el ambiente familiar en el
que crecemos no es seguro?
¿CÓMO SABER SI MI
FAMILIA ES TÓXICA?
Las familias tóxicas
son familias disfuncionales donde los miembros no se encuentran seguros. Es
decir, el hecho de haber crecido en ellas, o tener que permanecer cerca una vez
la persona se ha hecho adulta, perjudica gravemente la estabilidad emocional y
bienestar de la persona. Es difícil definir cómo es una familia tóxica, porque
los problemas familiares pueden venir de muchas fuentes dentro de la misma
familia. Como decía León Tolstoi en su famosa frase: "Todas las familias
felices se parecen, pero cada familia infeliz lo es a su manera“
Para saber si
tenemos una familia tóxica, lo primero es reflexionar sobre cómo nos sentimos
cuando pensamos en nuestra familia: Si nos hace sentirnos respaldados y tenemos
el convencimiento de que nos van a apoyar y ayudar cuando lo necesitemos,
aunque no compartan nuestras decisiones, probablemente nuestra familia esté más
cerca de ser funcional. Por otro lado, si cuando pensamos en nuestra familia
sentimos que no formamos parte de ella, o que no nos aceptan ni apoyan, incluso
sentimos que nos dan más problemas que ayuda, deberíamos empezar a plantearnos
que a lo mejor nuestra familia podría clasificarse como una familia
disfuncional o tóxica.
Llegar a reconocer
que estás en una familia tóxica e identificarla como tal puede ser difícil. No
solo porque es duro aceptar que tus familiares no son aquello que un día
necesitaste, sino porque pueden aparecer sentimientos de culpa, de traición y
miedo a enfrentar las consecuencias. Sin embargo, es importante recordar que tu
bienestar emocional es primordial, y que tienes el derecho de vivir en un
entorno seguro y amoroso. A continuación, detallamos algunos signos que pueden
ayudar a identificar un entorno familiar poco saludable:
·
Comunicación no asertiva Se caracteriza
por la crítica constante, el menosprecio, el sarcasmo y el abuso verbal y/o
físico. Las interacciones suelen estar llenas de conflictos y no hay espacio
para la expresión abierta y respetuosa de ideas y emociones. Todo son críticas,
malos modos, y muchas reacciones irónicas o como dijeran de mala leche donde
todo lo que se dice, hace y reacciona son críticas desde las más inofensivas
cargadas de un peso emocional negativo, humillante, denigrante, siempre con
tonos de poco valor y en el que se siempre se trata de hacer menos cualquier
acción, pensamiento, decisión, dicho y comentario. Estas dinámicas generan un
ambiente hostil de tensión y estrés constantes, lo que afecta la salud mental y
emocional de todos los miembros de la familia o del chivo expiatorio.
·
Falta de apoyo emocional Las necesidades
emocionales no son atendidas por tus familiares tóxicos y puede haber falta de
escucha, empatía y amor incondicional. Cuando esto ocurre las personas pueden
sentirse solas, incomprendidas o invalidadas en sus emociones.
·
Dinámicas de poder desequilibradas Uno o
algunos miembros de la familia pueden ejercer un control excesivo sobre los
demás. Tomando decisiones sin consultar, imponiendo sus puntos de vista o
utilizando su posición de poder para manipular y dominar a los demás.
·
Manipulación y control La gente tóxica en
la familia lo utiliza para obtener lo deseado o mantener al resto en una
posición de sumisión. Puede incluir chantaje emocional, amenazas o juegos
mentales. Las necesidades individuales a menudo se pasan por alto o se subordinan
a las necesidades de uno o unos pocos miembros dominantes.
·
Falta de límites saludables Los límites
personales y el respeto por los límites de los demás pueden ser ignorados o
violados constantemente. Puede aparecer en forma de invasión de la privacidad,
falta de respeto por la individualidad y falta de reconocimiento de las
necesidades y los deseos de cada miembro de la familia.
·
Falta de apoyo en el desarrollo personal En
estos casos los logros individuales pueden ser minimizados o menospreciados por
un familiar tóxico, y las metas y aspiraciones personales pueden ser
desalentadas o ignoradas.
·
(Co) Dependencia emocional Los roles
pueden estar muy fijados y los miembros de la familia pueden sentirse obligados
a satisfacer las necesidades de los demás en detrimento de su propio bienestar
y autonomía.
Es importante
recordar que la presencia de uno o varios de estos signos no necesariamente
significa que tú familia sea tóxica o que todos los miembros sean abusivos. Sin
embargo, si estos patrones son consistentes y tienen un impacto negativo en tu
bienestar emocional, es importante buscar apoyo y herramientas para gestionar
la situación.
TIPOS DE FAMILIAS
TÓXICAS
Como decíamos
anteriormente, no hay un tipo concreto de familia tóxica. Si no que podríamos definir
como tal a todas las familias que no permiten el desarrollo integro y libre de
sus miembros. A continuación, ponemos una serie de ejemplos de características
de las familias que pueden considerarse tóxicas:
·
No hay una estructura en cuanto a educación,
límites, afectividad, convivencia, horarios, y los conflictos entre los
miembros de la familia son constantes, dando como resultado lo que solemos
llamar como una familia desestructurada.
·
Hay palatalización: los hijos son los que se
encargan del cuidado (físico y/o emocional) de los padres. Los roles están
invertidos.
·
Alto grado de criticismo: la crítica siempre
está presente en las relaciones entre los miembros.
·
No existe la comunicación.
·
Existencia de temas tabú que han tenido impacto
en la familia y de los que nadie habla: enfermedades, muertes, suicidios…
·
Maltrato físico, psicológico o abuso sexual.
·
Adicción de alguno de los miembros de la
familia, es muy fácil criticar, pero acaso te has tomado el tiempo para
averiguar porque esta persona se encuentra sumida en una adicción, acaso huye
de una realidad, acaso el abuso , las humillaciones y la disfuncionalidad lo o
la rebasaron, o acaso es por que es el mas sensato de todos que mira, ve y
valora una realidad de la que todos escapan, ignoran y en la cual es más cómodo
seguir en su ambiente toxico, contaminando a nuevas generaciones en un
“nosotros estamos bien”, y seguimos maltratando, humillando a nuestra pareja,
hijos, no solo enseñándoles el patrón sino enseñándoles que esa es la única
manera que existe de vivir en familia.
«Alejarse de una familia tóxica no es un acto de
egoísmo, sino de autocompasión. Es un paso necesario para proteger tu bienestar
emocional y buscar una vida saludable y plena.» – Carl Rogers
¿QUÉ HACER CUANDO
TU FAMILIA ES TÓXICA?
Muchas veces nos
encontramos en terapia personas que llevan años lidiando con sus problemas
familiares y que todavía están pagando las consecuencias de haber nacido y
crecido en un hogar tóxico. Este tipo de paciente, aunque es consciente de la
toxicidad de su entorno, tiene dificultades en el presente. En otras ocasiones,
nos encontramos pacientes que están tan sumidos en la toxicidad familiar que
han llegado a normalizarla y la consideran normal.
Vengamos del tipo de
familia que vengamos, es muy importante saber que lo más importante es la
estabilidad de la salud mental individual de la persona y su felicidad. A veces
esta estabilidad se puede conseguir de la mano de la familia, estableciendo una
serie de cambios, pero, a veces, la única solución es poner límites y
alejarnos.
Si crees que tienes
una familia tóxica que es, o ha sido, una fuente de sufrimiento en la
actualidad piensa qué puedes hacer para mejorar tu relación para con ellos. Y,
en el caso de que no puedas solo, pide ayuda profesional.
CUANDO TU FAMILIA
POLÍTICA ES TÓXICA
¿Y qué hacer cuando
tu familia política es tóxica? Otra de las situaciones posibles que nos podemos
encontrar es que la familia de nuestra pareja no nos haga sentir bien o no nos
trate de la manera más adecuada. En estos casos es muy importante la
comunicación con nuestra pareja. Tenemos que hacerle saber cómo nos sentimos y
qué necesitamos. También será muy importante que sintamos que nuestra pareja
nos entiende y nos da prioridad respecto a su familia extensa poniéndoles
límites. Si no sentimos que sea así, o sentimos que nuestra pareja los antepone
a ellos, puede que esta situación vaya empeorando en el tiempo y vaya
desgastando la pareja poco a poco.
Cuando nos unimos en
pareja, el objetivo es formar un nuevo núcleo familiar. Este núcleo es,
habitualmente, una negociación de las costumbres, proyectos y normas de los dos
miembros y es importante que estén de acuerdo. Es importante que los límites de
este nuevo núcleo estén claros y que den prioridad a los miembros de la nueva
familia frente a la extensa.
CÓMO ALEJARTE DE
UN FAMILIAR TÓXICO
“Si me alejo me
siento mejor, pero me siento culpable”, Muchas veces este punto nos resulta muy
difícil. Si este familiar tóxico es “relativamente lejano” podemos optar por
relacionarnos con él lo menos posible. Reducir nuestros contactos a los
imprescindibles: celebraciones, navidad… etc.
El problema viene
cuando este familiar tóxico es cercano: una madre tóxica, un padre tóxico, un
hermano… Normalmente, para más complicación, estas relaciones son muy
ambivalentes: “Si me alejo me siento mejor, pero me siento muy culpable”. En
estos casos es importante darnos prioridad a nosotros mismos. Saber qué nos da
bienestar a largo plazo y entender que en las relaciones familiares se entrelazan
un montón de emociones, a veces contradictorias, y que llevan con nosotros
desde que somos niños, por lo que también entra en juego el instinto de
supervivencia. Los patrones de apego y de relación que hemos establecidos de
niños con nuestros padres son una “plantilla” que tendemos a repetir, incluso
aunque nos hagan daño. Por eso a veces nos sorprendemos actuando de la misma
manera que cuando éramos pequeños.
En muchos casos el
cambio de estos tipos de relación, y el alejarnos de estos familiares tóxicos,
requiere de ayuda terapéutica, precisamente por el coctel de emociones que se
forma: miedo, tristeza, rabia, culpa… y que es difícil de manejar.
Alejarse de
familiares tóxicos es un camino que puede ser muy doloroso y complicado. Aquí dejamos algunos puntos importantes que te pueden
servir a la hora de hacer este proceso.
·
Valora tus necesidades El primer paso es
aceptar que mereces ser tratado con respeto, amor y dignidad. Valora tus
propias necesidades y prioriza tu bienestar emocional, físico y mental.
·
Busca redes de apoyo Busca comunidades,
grupos de apoyo o amigos que te brinden un entorno seguro y positivo. Estas
conexiones serán fundamentales para tu bienestar emocional y te ayudarán a
alejarte de tu familia.
·
Establece límites saludables Es importante
establecer límites claros para protegerte de las dinámicas tóxicas. Define qué
comportamientos o situaciones del ambiente familiar tóxico son perjudiciales
para ti y comunícalo de manera asertiva, manteniendo tus límites firmes. Si no
respetan tus límites, quizás tendrás que tomar otras decisiones como alejarte
de forma parcial o total de estas personas.
·
Terapia familiar y/o individual La
terapia familiar puede ayudar a modificar y mejorar la comunicación, a entender
y conocer mejor a cada persona implicada y a reconstruir la manera de
relacionarse. Si la situación te abruma, la terapia individual puede ser una
buena opción para sentirte más seguro y acompañado en el camino.
·
Busca orientación legal si es necesario Si
te sientes en peligro o experimentas abuso físico, emocional o sexual, no dudes
en comunicarte con las autoridades competentes o con organizaciones
especializadas que puedan darte apoyo y protección y para alejarte de tus
familiares tóxicos.
CONSECUENCIAS DE
CRECER EN UNA FAMILIA TÓXICA O DISFUNCIONAL
Las consecuencias de
crecer en una familia tóxica pueden ser muchas. De hecho, desde la terapia
familiar y sistémica, el síntoma, que normalmente es el motivo por el que el
paciente acude a terapia, puede estar generado o mantenido por el entorno
familiar. Es como si la toxicidad de la familia se “manifestara” en la
enfermedad de uno de los miembros.
A nivel más general
podemos ver las consecuencias de haber crecido en una familia tóxica en:
·
Baja autoestima
·
Alta autoexigencia
·
Autocrítica
·
Mala elección de pareja
·
Problemas de gestión emocional
·
Adicciones
·
Ansiedad
·
Depresión
·
Trastornos de la conducta alimentaria
¿CÓMO SOBREVIVIR
A UNA FAMILIA TÓXICA O DESESTRUCTURADA?
Tal y como decíamos
anteriormente, lo más importante para sobrevivir a una familia tóxica, es tomar
conciencia. Y después darnos prioridad a nosotros y nuestro bienestar.
Entendemos que todo esto es muy fácil de decir, pero muy complicado de llevar a
la práctica. En muchos casos, es importante recibir ayuda profesional para hacer
estos cambios
«La
familia no se limita a los lazos de sangre, sino que también puede encontrarse
en relaciones cercanas y significativas. Es el entorno donde desarrollamos
nuestro sentido de pertenencia y conexiones emocionales profundas.» – Carl
Rogers”.
Siempre lo decimos y
lo volvemos a decir, cuando hablamos de estos temas de forma tan general es
solamente para brindar información que ayude a la reflexión y al
autoconocimiento. Cada situación es única y muchas veces no es fácil reconocer
qué emociones se están activando en cada momento. La familia precisamente es un
lugar donde se pueden disparar muchas heridas y además todas al mismo tiempo.
Por eso, lo más
importante es revisar cómo te has sentido y cómo te sientes en tu entorno y
conocerte para entender lo que te está sucediendo. Y a partir de ahí buscar la
manera de conseguir crear relaciones que sean beneficiosas y satisfactorias
para ti y alejarte de tu familia tóxica y de cualquier otra persona que te
dañe.
Nos vemos la próxima
semana... Y mi consejo de siempre: come saludable, duerme lo suficiente,
realiza ejercicio, haz lo que te gusta, ocúpate, RESPETATE, AMATE Y SE FELIZ...
Y recuerda... Tu crecimiento personal es vital, y para lograrlo... Da el primer
paso... ¡ATREVETE!
Que
todo lo bueno te siga, te encuentre, te abrace y se quede contigo
No dejen de escribir
que queremos conocer sus comentarios, recuerden que tenemos una cita en: #EstamosEnConexión #RadioEnRedes
Todos los Lunes de 17:00 a 19 horas, a través de:
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