Bienaventuranzas y Nuevo Evangelio de San Alejandro
*Farragosos escritos hablan de tiempos malos y buenos de
Puebla de los Ángeles
Por Raúl Torres Salmerón
Con motivo de los nuevos tiempos, al inicio del Adviento, es
decir de preparación del nacimiento de Jesucristo, en el Valle Celestial de
Puebla de los Ángeles, se publica el Nuevo Evangelio político, apócrifo, de
dudosa autenticidad y sin firma, relacionado con los tiempos que vive y vivirá
Puebla.
Algunos textos oscuros y difíciles de comprender, hallados
en las cuevas de Valsequillo, hablan de Mesías, Profetas, Patriarcas y
Sacerdotisas que habitaron en el Valle de Puebla. No es fácil leer el texto,
borroso y roto por el tiempo.
Hablan de Patriarcas que no terminaron su reinado, como lo
fueron el Gran Reformador Aarón, llamado también el Príncipe de los Notables;
otro fue el gran militar de la Real Caballería, Antonio de triste memoria; el
Gran Patriarca de Atlixco, Rafael quien huyó de Puebla. También refiere a los
Mesías Gonzalo El Chico, Mario el Magistrado y Guillermo el Locutor, quienes pasaron
fugaces por el Valle, hasta la llegada del Gran Mesías Alfredo el Grande, quien
puso orden, paz y concordia en el pueblo elegido.
Algunos escribanos, hablan en farragosos escritos,
papasales, textos oscuros y jabonosos, mal pergeñados en papiros, del brillante
futuro en el Valle, pero no les creáis, son enviados del averno.
Quedarían pasmados esos escribanos, si hubieran sabido que,
la historia de Puebla se repitió muchos años después. El Patriarca Rafael El
Menor heredó el Reino al Mesías Tony, le siguió la no tan poderosa Sacerdotisa Marta
Érika pues murió inmediatamente al tomar posesión del Reino. Tocó al Gran y
Supremo Mesías San Guillermo aplacar las iras populares y preparó el camino al
terrible Patriarca Miguel, quien también murió, pero después llegó el Gran Rey
Salomón Sergio quien puso orden.
Los antiguos documentos hablan de un gran Mesías, grande
entre los grandes, el Mesías San Alejandro. Esos viejos textos, ya traducidos
por expertos, hablan de un Nuevo Evangelio y de las Bienaventuranzas o
Bienestar que tendrán sus seguidores.
EL EVANGELIO DE SAN ALEJANDRO. CAPÍTULO ÚNICO
1. Y en aquellos días de tribulaciones y problemas, la
pareja compuesta por el Mesías San Alejandro, acompañado de su mujer Cecilia y
sus hijos, llamó a sus discípulos y les dijo:
2. He aquí que ya llegó el tiempo de gobernar y los 100 días
del Señor sobre la tierra están contados. Congregaos y venid a mí. En verdad os
digo que yo soy el que soy y solamente a mí me obedecerán.
3. Porque los hombres conocieron aquellos días al ungido y
le fueron a rendir pleitesía y honores al lugar donde habita con sus abuelos,
sus padres y sus hermanas, también algunos burros y algunos bueyes. Además, se
reunió y tuvo la protección de la Gran Reina de Saba, Claudia S.
4. Los principales apóstoles, Samuel El Bautista, José Luis
a quien le llaman el Gran Señor del Choco –ignoramos la causa--, el Gran Almirante
Francisco El Feroz, quien no es de esta tierra, son quienes lo acompañan en sus
sufrimientos y en sus alegrías. Ellos serán la cabeza de su iglesia y de su
trono, hoy y mañana, por los sexenios de los sexenios.
5. Y llegó entonces Pepe El Escribano, Cronista de gran
prosapia, el más amado y preferido de los discípulos, quien se había encargado
de la difusión de la Buena Nueva, muy cercano al Señor.
6.También llegó la Sacerdotisa Claudia, de esta tierra, pero
su especialidad es la promoción del Gran Patriarca y sus relaciones.
7. Aunque los papeles no están muy claros, se habla de que
antes de la llegada de San Alejandro, hubo un falso Mesías, familiar suyo, de
nombre Ignacio, quien le disputó la herencia celestial y al igual que Esaú y
Jacob, el entonces falso Ignacio cambió la bendición celestial tricolor por un
plato de lentejas viejas. Pero he aquí que el falso Mesías se convirtió en el
heredero de las principales tribus inconformes de Israel.
8. Testigo de todo lo anterior y quien ayudó a la llegada
del nuevo Mesías, el Gran Rey Salomón Sergio, Patriarca del Oriente, conocido
como el discípulo especial, por su forma de ser, fue el amo y señor de las
tierras de que convergen en el Valle Celestial, donde en su corto reinado, puso
orden y lo lanzó a mejores tiempos. Muchos desterrados volvieron y los
encarcelados por el nefasto Patriarca Miguel fueron liberados. Como el Profeta Manuel
y el Gran Sacerdote Melquiades, Salomón fue llevado en vida al cielo.
9. Una vez que todos se reunieron, al unísono alzando la
voz, le dijeron: Henos aquí, Señor, prontos a tu mandato, pero queremos saber
lo que nos prometes y lo que prometes a los hijos de nuestras tribus.
10. El Mesías San Alejandro, con túnica morada y el cabello negro
brillante, con el rostro de color rojo cuando se emociona y se enoja, les respondió:
11. He aquí lo que les prometo: Vosotros, una vez que han
estado conmigo, haréis cera y pabilo a los enemigos del Reino, pero tengan
cuidado porque llegarán los días en que todos buscareis ser ministros y
magistrados.
12. Porque vosotros sois piedras y sobre alguna de esas
piedras, edificaré mi reinado guinda por los siglos de los siglos. Reinaré
desde el Valle Celestial de Puebla que ya no será de los impíos pecadores del
tricolor, ni de las tribus azules de los fariseos que vestían de luto y oro, ya
desparecidos.
13. Os daré las llaves del Reino y principalmente del
presupuesto, que, aunque es hecho y ejercido por otros jefes de tribus ajenas a
nosotros, lo que atares en la tierra poblana será atado en los cielos y lo que
desatares, será desatado.
14. Luego, el Mesías el San Alejandro reunió una gran
muchedumbre e hizo una gran entrada a la Jerusalén poblana. Los antiguos y
nuevos políticos, los ignorantes y los sabios, los sumos sacerdotes, los
generales y guardias de la Gran Reina de Saba Claudia S., los burócratas, lo
homenajeaban y les decían a gritos: “Hosanna, bendito el que nos dirigirá por
lo menos 6 años”.
15. Y se postraron ante él. Y él, sonriendo, los ungía. Ya
con anterioridad había escogido a sus discípulos y se los llevó a predicar
junto con Él. Cosas terribles predicaron, se habla del nuevo orden, del buen
manejo de los denarios, de no mentir, no robar, no traicionar.
16. Y entonces en estos tiempos en algunos de los medios de
comunicación hay mucha perversidad. Habrá quienes escriban contra de nosotros,
pero no los sigáis. Esos serán condenados y escarnecidos en el fuego eterno.
19. Y en aquellos días terribles, solo los grandes personajes
del Valle Celestial de Puebla, afines a mi doctrina serán premiados, pues
defenderán a las instituciones.
20. No temáis, en verdad os digo que mis palabras no
pasarán.
BIENAVENTURANZAS (BIENESTAR). ANEXO
DEL EVANGELIO DE
SANTO ALEJANDRO
Al final primer capítulo del Evangelio del Santo Alejandro
existe un anexo sobre las Bienaventuranzas o el Bienestar, que a continuación
se relatan:
1. Mi reinado será por lo menos, de seis años y aquellos que
quieran seguirme deberán obedecer con los siguientes preceptos, dijo el Mesías.
2. Bienaventurados los que trabajen de 8 a 16 horas, porque
cobrarán su quincena puntualmente, más un bono durante los primeros años.
3. Bienaventurados los que supriman los desayunos y comidas,
no gasten las limosnas y los fondos públicos, porque de ellos será el
presupuesto de este sexenio.
4. Bienaventuradas las mujeres, porque una mujer procurará
la justicia terrenal y el resto ocupará cargos de menor rango.
5. Bienaventurados mis fieles seguidores, porque de ellos
será el control casi total del estado de Puebla.
6. Bienaventurados los apóstoles y discípulos de primer y
segundo nivel, porque ellos cobrarán sus salarios y compensaciones.
7. Bienaventurados los representantes populares, seguidores
míos y obedientes porque de ellos serán mis iniciativas de ley y tendrán que
aprobarlas.
8. Bienaventurado el líder de la mayoría de mis discípulos
porque ese es mi pastor.
9. Bienaventurados los encargados de impartir justicia y mi
discípulo, porque de ellos saldrán los designios jurídicos de estos años.
10. Bienaventurados los preservadores del medio ambiente por
que tendrán a su pastor, un discípulo avezado en las luchas ecológicas y la
conservación del medio ambiente, aunque esto tardará un poco en cumplirse.
11. Bienaventurados los guardianes del orden público, porque
ellos tendrán un gran apóstol a quien imitar y serán los encargados del orden,
esto se cumplirá luego.
12. Bienaventurados serán los que estén al cuidado del orden
y del desorden porque ellos serán saciados, pues serán los más importantes y
quedarán incluidos en la nómina de las limosnas.
13. Bienaventurados mis seguidores que emigraron al norte,
tendrán un apóstol que los oriente y un discípulo que vea por ellos.
14. Bienaventurados los periodistas que presenten pruebas de
sus dichos y acusaciones, porque ellos serán escuchados.
15. No serán tan bienaventurados los periodistas que tiren
la piedra y escondan la mano y no presenten pruebas de sus denuncias, porque de
ellos será el fuego del infierno.
16. Bienaventurados los enviados por los dirigentes del
Centro del país, porque encontrarán apoyo y comprensión del Mesías, cuando se
trate de trabajar por Puebla.
17. Bienaventurados esos dirigentes enviados de otra parte
cuando haya procesos políticos electorales, porque ellos serán de la oposición,
pero actuarán libremente.
18. Bienaventurados los reaccionarios y nuestros opositores,
porque ellos tendrán derecho al sacrosanto pataleo.
Este Evangelio no trata de las numerosas indicaciones y
muchísimas cosas que han sucedido, pero lo escrito será suficiente para dar
testimonio del Mesías y para convencer a los incrédulos.
En verdad os digo, termina el Mesías, quien crea, quien oiga
y quien obedezca, no se equivocará. Este es el camino a la salvación de estos
seis años.
En fin, como escribió Raúl de Jesús (Puebla, 1976) en su
poema Él:
Él
solo,
con tiempo,
un sexenio
más,
lo mismo, el
cambio
tricolor y
luego guinda.
Lo mejor,
aparenta, por
amor a
Puebla, promete.
Actúa, dirige,
se reinventa,
los
convence, predica, retoma,
sube y baja
emocional, él hereda.
Busca los
seis años estar y después se irá.
Puebla
reposa quieta y con aire de futuro.
raultorress@hotmail.com
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